Quizá deberíamos dejar de planear, y empezar a volar un rato

Te prometo un siempre.

Mi vida era como una noche sin luna antes de encontrarte, muy oscura, pero al menos había estrellas, puntos de luz y motivaciones... Y entonces tú cruzaste mi cielo como un meteoro. De pronto, se encendió todo, todo estuvo lleno de brillantez y belleza. Cuando tú te fuiste, cuando el meteoro desapareció por el horizonte, todo se volvió negro. No había cambiado nada, pero mis ojos habían quedado cegados por la luz. Ya no podía ver las estrellas. Y nada tenía sentido
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martes, 31 de julio de 2012

Mi Todo

23:02 De la noche. He empezado a escribir ya para poder subir esta entrada justo a medianoche, para que la veas, para que un año más yo sea la primera en poder felicitarte. Es ya tu segundo cumpleaños a mi lado y desde luego que no será el último, porque no voy a separarme de tu lado hasta el día de mi muerte. Hoy, sales del numero redondo, para cumplir 21 años ya. ¡Quién diría que iba a estar con un hombre que me lleva 5 años! Incluso 6 durante nueve días. Pero nada es una barrera para nosotros. Yo, prometo hacer que tus 21, igual que lo fueron tus 20, sean inolvidables, que estaré contigo en las cosas malas y en las buenas, aunque procuraré que las buenas sean muchas más que las malas, y sé al menos de dos perdonas que me ayudarán a no cometer tantos errores como cometo y hacerte feliz como realmente te mereces. Me he dado cuenta de que cada vez eres más importante en mi vida, que si tú te vas, que si no te vuelvo a ver, vas a dejar en mi un vacío totalmente irreemplazable. Me he dado cuenta de que siempre has estado a mi lado, ayudándome, apoyándome en lo bueno y en lo malo de mi vida. Conocerte ha sido una de las mejores cosas que me ha pasado. Gracias. Gracias por todo. Las cosas ocurren deprisa, a veces me gustaría parar el tiempo en esos pequeños momentos que me hacen tan feliz... Gracias, porque prácticamente en todos esos momentos, estaba a tu lado. Ingenuo y cabezota, tan patoso y tan sensible, cálido y hermoso. Dulce, tierno. Perfecto. Eres todo cuanto necesito para vivir esta agobiante existencia. Mi estrella en el interminable universo. El que me mantiene en el presente, el que me da una razón para existir más allá del deber. Mi luz, mi tesoro. Mi propio corazón. Te amo más allá del límite del querer. Siento que el cielo eres tú. Que mi vida solo pasa por ti, que mis labios necesitan besarte, que mis manos pertenecen a tu piel, que mis ojos solo pueden mirarte a ti,q ue mi sonrisa es tuya... Que mi corazón, solo puede enamorarse de ti.

Solo queda decir que muchas felicidades, que eres todo lo que podría desear  y que no te olvides d emi esta noche, ni ninguna otra. 
Te amo Adrián García.

jueves, 26 de julio de 2012

Bueno. O quizás no.

Pasan muchas cosas en la vida. La verdad, es que hoy he echo algo que nunca esperaba a hacer de esta manera, no siendo necesario. Digamos que he timbrado a la puerta de un viejo amigo, aunque quizá me de una patada. Hay cosas en la vida, en las que tienes que confiar, depositar esperanza, tener fe. Y esta, para mi, es una de ellas. 
Todo irá bien, no pasará nada malo. Esta vez, no. Pensaré bien lo que hago, ahora soy dueña de mis propios actos y de mi depende mi propio futuro. 
Cierra los ojos. Ahora, déjate llevar. Relájate.

lunes, 23 de julio de 2012

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Y cuando sientes que tu corazón se esta rompiendo en millones de pedacitos, que se te cae el mundo encima, que te tiembla el pulso, que te duele el estómago, que no puedes hablar. Cuando piensas que todo va bien, entonces Atlas suelta su bola del mundo para dejarla caer encima de ti. Y sientes todo el peso en tus hombros. El mundo, aún no se ha roto, aunque tú desearías que fueras así. Sigue, anda, camina, no mires. Déjate llevar, sigue la corriente, no hables, no escuches. Será peor. El estómago... ai, duele. Cálmate. No, no puedo, sabes que no puedes mandarme eso, por que no lo haré. Relájate, respira. No. Prefiero asfixiarme en un mar de pena, no puedo hacer otra cosa. No sientes, no hablas, no ríes, no lloras. Manifiesta tu dolor. No, no puedo... Mi madre... Tzz. Hace frio, de repente. Creo que tendré que ponerme una chaqueta o no sé, algo. Olvídate, no pienses. Lo segundo, es fácil. 
Lo difícil es que el corazón y la cabeza van a su puta bola. Y por mucho que no  pienses, sientes.

miércoles, 11 de julio de 2012

Un café corto, o largo, sin mirar el reloj.

Reciclar ideas. Mirar hacia dentro, hacia fuera. Ahorrar energías. Soñar... Regalar una sonrisa. Una palabra amable. Una caricia. Un café solo, con leche o con los amigos. Mirar al cielo. Dormir debajo de un árbol. Andar descalzo por la hierba, por la luna. Oler la brisa del mar. 
En el silencio de tu alma se esconden los más bellos secretos de tu corazón. El silencio no es la ausencia de sonidos, es un estado tranquilo en el que puedes oír lo que se mueve en tu interior con mayor claridad. En silencio se descubren maravillosas conversaciones que la palabra sería incapaz de pronunciar. En el momento callado y tranquilo los dones de las personas se hacen visibles. La palabra, cuando es clara y sincera, nos acerca a los demás, nos ayuda a darnos a conocer, nos muestra lo que los demás piensas y viven... el silencio es el mayor grado de comunicación que podemos llegar a conseguir con un ser humano. Ábreme el cofre sagrado de tu silencio, comporte conmigo desde lo que eres, desde lo que vives, desde lo que lloras y desde donde te alegras... sin palabras. Cierra los ojos, escucha. Tápate la nariz, escucha. Ponte tapones y escucha. El silencio suena. No es la nada. La niebla y el silencio se parecen. El silencio tiene sonidos, tiene sentimientos y palabras. Todo ayuda a que suene el silencio. En la biblioteca suena a nervios. En la iglesia suena a fe. En la cama, suena a todo. Es caprichoso, ¿cuántas historias terminaron con un silencio? es tan sonoro que es una respuesta a una pregunta. El silencio reconforta el alma, la apacigua, porque el silencio te susurra que todo esta bien. Por que mientras escuches el silencio, estarás vivo.
El silencio tiene sonido, tiene peso, tiene vida. Cállate y escucha.
Entraré de puntillas, sin hacer ruido, para no romper la hermosura que me ofreces a través de tu silencio...

viernes, 6 de julio de 2012

Sueño eterno.

Algo en mi cabeza...no, algo en mi corazón, acaba de hacer click. Me he dado cuenta de que cuando todo estaba perfecto, he intentado mejorar cosas que no había que mejorar y han estallado. Él ha estallado, y to también. Estallado en un torbellino de emociones mala y buenas que se confunden. En un torbellino que aparentemente es tan grande que nadie podría pararlo. A pesar de haberlo intentado, no lo he conseguido. Hasta hoy. Nunca intentes parar una tormenta de emociones con la mente, con la cabeza o con el cerebro. La voz de la experiencia hace mucho tiempo que me ha dicho, y yo he aprendido, que hay que hacer y decir lo que sientes, que hay que usar el corazón. Cierra los ojos. Vamos, ciérralos! Bueno, ahora no, si no no podrás seguir leyendo. Pero cando tengas un hueco, ciérralos. Pero bien eh, no valen trampas. Ahora, busca una mancha negra en tu interior. La ves? No. Yo tampoco la veía. Sigue buscando. Siente lo que pasa. Siente que todo lo que te dicen te entra directo en el corazón, ya sea bueno o malo. La ves ahora? Mírala. Cómo no la has podido ver antes? Es enorme, y ahora lo ves, ahora lo siente. Pronto desaparecerá, ahora que sabes que está ahí, la quitarás.
Y ahora, en un rato, cerraré los ojos. Y me dejaré llevar. Hasta que de repente, me envuelva en sus cálidos brazos Morfeo, y valla a vivir a los sueños.

lunes, 2 de julio de 2012

Cortisol vs Serotonina

Puede que pasen muchas cosa que él no pueda llegar a entender, y que tenga miedo por cosas que no van a pasar. Llegará un día, en el que nuestros recuerdos sean nuestra riqueza. Y yo, quiero tener recuerdos buenos y no malos. Y desde que te conocí, no se por que te llamo pequeño. Llamar "pequeño" a la persona más grande que has conocido nunca, es un poco tontería. Puede que seas su primero, su último, o su único. Él amó antes, él puede amar de nuevo. Pero si ne ama ahora, ¿Qué más importa?.  Él no es perfecto, yo tampoco y los dos nunca podremos ser perfectos juntos. Pero si él puede hacerte reír, hacerte pensar las coas dos veces, y admitir que eres humano y que cometes errores, aférrate a él y dale lo mas que puedas. Puede que no piense en mi cada segundo del día, pero me dará una parte de el que sabe que puede ser roto... su corazón. 


Así que no hagas daño, no trates de cambiar su forma de ser, no analices, y no esperes más de lo que pueda dar. Sonríe cuando te haga feliz, hazle saber cuando te hace enfadar y añorala cuando no esté contigo.