Quizá deberíamos dejar de planear, y empezar a volar un rato

Te prometo un siempre.

Mi vida era como una noche sin luna antes de encontrarte, muy oscura, pero al menos había estrellas, puntos de luz y motivaciones... Y entonces tú cruzaste mi cielo como un meteoro. De pronto, se encendió todo, todo estuvo lleno de brillantez y belleza. Cuando tú te fuiste, cuando el meteoro desapareció por el horizonte, todo se volvió negro. No había cambiado nada, pero mis ojos habían quedado cegados por la luz. Ya no podía ver las estrellas. Y nada tenía sentido
.

domingo, 25 de febrero de 2024

Fox

Hoy sí sé como estoy, y sé también que busco aquí.

Vengo a recordarme lo bonito de algunas cosas. 

Lo bonito de no trabajar el fin de semana aunque se torne raro. De tener la casa limpia. Lo bonito de tener unos gatos que se acuestan contigo y que te quieren de manera incondicional. 

De compartir una cama con alguien que quieres, de poder ver una serie que te gusta o de poder ver una para dormir. Lo bonito de tener un sitio y una compañía a la que llamar casa. 

Que te hagan un café, que te mimen cuando estás enferma. Ver reels juntos, escuchar mil podcast. Y la suerte de tener una buena manta para el sofá y una lámpara preciosa con un universo y la música más bonita del mundo. La suerte de poder ponerte calor y de tener una persona que te ama cuando estás de regla(y cuando no). Desde luego, soy la niña más consentida de todas.

Un poco de vino, un libro precioso, un temporal fuera mientras yo estoy dentro. 

Un ensayo de teatro, salga como salga. Un beso. Aunque no siempre esté bien dado ni sea el más bonito. 

Sopa de cocido, mi favorita. No tener que poner el despertador para levantarme. Emborracharme en casa y bailar con la persona con la que quiero pasar mi vida. 

La semana que entra va a pesar como una losa... Pero no quiero que se me olvide que, aunque a veces no lo vea o sea en dosis pequeñas, hay cosas bonitas que todos los días te endulzan la vida, aunque sea un poco. 

Aunque sea de espaldas.