Quizá deberíamos dejar de planear, y empezar a volar un rato

Te prometo un siempre.

Mi vida era como una noche sin luna antes de encontrarte, muy oscura, pero al menos había estrellas, puntos de luz y motivaciones... Y entonces tú cruzaste mi cielo como un meteoro. De pronto, se encendió todo, todo estuvo lleno de brillantez y belleza. Cuando tú te fuiste, cuando el meteoro desapareció por el horizonte, todo se volvió negro. No había cambiado nada, pero mis ojos habían quedado cegados por la luz. Ya no podía ver las estrellas. Y nada tenía sentido
.

viernes, 17 de abril de 2015

'Hoy aprendí que me hace falta una libreta para apuntar.'

Las personas que en vez de un teléfono en el bolsillo llevan una libreta y bolígrafo escasean, pero existen. Cada vez confirmo más mi teoría de que nada en la vida es imposible y que todo es cuestión de voluntad. A veces, las mejores ideas se te ocurren en un bus a ninguna parte, o saliendo de la ducha. Y entonces seguro que la mayoría de vosotros pensáis: "Esto tengo que apuntarlo!" pero no lo hacéis. Y el tiempo pasa, y os olvidáis de todo eso que habíais pensado, de todas las cosas que queríais hacer.
Los seres humanos, las personas, estamos compuestas de sueños. Sueños que tienden a romperse en pedacitos por nada más que nuestra culpa. Todo consta, de nuevo, de una decisión. De ese click que seguro que muchos habéis sentido en la cabeza y que os ha cambiado la vida. Y esa decisión de la que os hablo no es otra que esa que dice, "voy a levantarme del sofá" y eso conlleva millones de cosas. Conlleva un voy a cambiar mi vida, un voy a luchar por lo que quiero, un los sueños son posibles, que os lo digo yo. 
Que la felicidad no es una cosa extraña que nadie conozca. Pero si no eres perseverante en intentar cumplir esos sueños, claro que se os van a escapar. Se van a ir como se va el globo de un niño cuando lo sueltan a propósito. Y en ese caso habrá un lado de vosotros que empiece a pensar en que hay cosas que son imposibles, irrealizables.
Y os digo de verdad que no es así. Que si queréis ir a la luna, pues luchad por ello y seguro que algún día iréis. 
También es cierto que hay sueños más fáciles que otros. Pero quiero que viváis la vida de manera que cuando logréis conseguir ese sueño os regodeéis un poco en vuestra felicidad, pero no os encontréis pensando ¿y ahora que hago? Porque no debemos de tener tan solo una meta en la vida, ni tenemos por qué perseguir solo una a la vez. Simplemente hay unas que necesitan de más o menos tiempo, de más o menos esfuerzo. 
Pero despertad chicos, y hacedlo rápido. Porque quizá tengáis en vuestras manos la oportunidad del ser del todo felices fuera de vuestra zona de confort y el árbol no os esté dejando ver el bosque. Abrid los ojos, por favor. Porque la vida pasa, y hay cosas que no se pueden dejar por la mañana. Hay cosas que en unos años no podréis hacer, pero ahora sí. Y estoy seguro que eso será una experiencia inolvidable.
Hay cambios de actitud y pensamiento que pueden haceros mucho más felices de lo que sois, no lo olvidéis. Dad un giro de 360º a vuestra vida si no estáis contentos con ella.
Y mientras tanto, sé feliz con lo que tienes, porque nunca sabes donde estará tu princesa.

sábado, 11 de abril de 2015

Titiriteiro, porque titirita.

'Foi. Antes de subir ó trapecio, a rapaza, vestida de pescadora, cantou. Na metade da canción dirixiuse á butaca que ocupaba él, e botoulle o sedal da cana, mentres lle dicía entre as risas de todos: "Pica, pica, pececito." 
Volvéronse atopar ó día seguinte. 
Él tiña un sombreiro de palla sobre dos ollos pra tornar o sol. Volveulle preguntar: "Lémbraste del?"
Sentiu os seus labios dela que se pousaban nos seus. Foi coma un trallazo. Unha ledicia branca nacíalle dentro do corazón. Despois, bicáronse. Bicáronse moitas veces. E ela apoiou a súa cabeza no peito del. 
Pronto correu a noticia de que se vían no río. Na casa, rifáronlle. "O que me faltaba! -dixera seu pai- Un fillo titiriteiro!"
Pero seguíanse vendo ás escondidas.'
Sé feliz con lo que tienes, porque nunca sabes donde estará tu princesa.

viernes, 10 de abril de 2015

La gran decisión.

Con el paso del tiempo rara vez nos vamos a arrepentir de haber fallado, y sin embargo nos va a pesar en nuestro pasado el ni siquiera haberlo intentado. 
Os voy a decir una cosa que muchos de vosotros no queréis y otros no lográis aceptar, y posiblemente sigáis sin hacerlo después de leer esto, pero ahí va: La vida está compuesta de decisiones. Y si, es así, lo queramos o no. Cada día tenemos que tomar una serie de decisiones que puede llegar a cambiar nuestra vida entera o tan sólo ese día, pero todos los días una simple decisión hace que algo cambie. 
El simple hecho de ir por otro camino a casa esta vez, de que empiece a llover y en vez de correr te quedes ahí sintiendo un poco más, de quedarte un poco más después de teatro con alguien... Puede que tan solo suponga que llegaras a casa más tarde o que cogerás un resfriado. Pero también puede ser que por ir por otro camino te encuentres a alguien que hacía mucho tiempo que no veías y retoméis la amistad donde la dejasteis, o que bajo la lluvia te pongas a pensar y de repente algo haga click en tu cerebro y todo cambie, o que con esa persona con la que te quedaste un poco más pase algo inesperado y de repente os encontréis mucho más unidos. 
Nunca os habéis preguntado ¿que hubiera pasado si...? Pues eso quiere decir que en algún momento de vuestra vida habéis tenido que tomar la decisión de si hacer o no una cosa. O a veces esa decisión incluso no estaba en vuestra mano, como cuando pensamos que hubiera pasado si en vez de ir al instituto en el que ahora estás hubieras ido a otros. 
Hay personas que estas decisiones las toman sin darse cuenta prácticamente, por impulso, y les va bien o a veces no. Y gente que le da tantas vueltas a las cosas para escoger el camino correcto que les va bien, o a veces no. Con esto chicos, quiero deciros que no existe una forma universal de escoger la mejor decisión, porque nadie sabe cual será y puede que en el futuro te arrepientas de haber tomado esa decisión o simplemente que te vaya bien. Pero ha sido lo que tu creías que sería mejor y eso... eso no es malo. No puedes culparte por haberte equivocado en algún momento de tu vida porque es completamente imposible saber lo que va a pasar después de esa decisión.
Con esto no quiero que de repente empecéis a darle vueltas a cosas como que hacer cuando llueve o por dónde volver a casa, simplemente que hay decisiones que se toman por impulso y otras que se toman tras deliberar bastante. Solamente haz lo que quieras, lo que creas mejor, y no te arrepientas de ello, porque de verdad no merece la pena. La vida, está hecha de decisiones, a veces grandes o a veces pequeñas, pero decisiones. No lo olvidéis.
Sé feliz con lo que tienes, porque nunca sabes donde estará tu princesa.

jueves, 9 de abril de 2015

Perdón por los bailes.

El hotel no esta tan mal como pensaba. Hay disparos entre un árbol y una ráfaga de viento en la ventana. En la calle un niño roba a un indigente que se esconde de la gente por vergüenza, no levanta la mirada. Y una puta me sonríe, le hago gracia. Le tiré la flor que adorna la bañera, me recuerda a la escalera que me hacías bajar para besarte. Como una droga cortada me endurece tu recuerdo y ahí me quedo. Voy a tener que volver a pedir que no me pasen llamadas... Ya ves, no hay mas que un cuerpo en el suelo pensando en tu aliento que empieza a gemir. Vas a tener que volver, o no se si esta noche habrá concierto. Ay amor! Que dueles como el viento, que hay sed y todo este desierto, no ves que se me abre la boca. Ay amor! Cargado de recuerdo en la luz que amanece diciendo que tu sonríes más ahora. Hay una mujer maldita que me habla de pie en el bar que esté, un rock and roll y una fotografía a medias. Ay! Hotel con un niño cabrón, con un mendigo robado, con una hombre a mi lado que vino a cobrarme el amor, a pedirme perdón por los bailes. Que vino a matarme, que vino a matarte. Que vino a robarte la voz que en la calle sonrió a tus verdades. Que subió a brindarme el calor que tu cuerpo no me dio. Y si no quieres venir no habrá charco de sangre, y luego llega el desastre de tocarme solo. Ni mas canciones cobardes, ni ramas de escombros. Y si te quieres venir, tráete una copa de vino, una sonrisa carmín, un malecón de suspiros. 

Vuelvo a verte, moreno entre la gente, tan guapo como siempre, pero ahora en los hoteles guardo otra ropa interior. 

Vuelvo a verte sonriendo en los andenes, tapándome la luna, y nunca lavé el coche callando este derroche, gritando yo ninguna. Vuelvo a verte, ay amor!

miércoles, 8 de abril de 2015

Besos de fuego y sal.

Una vez alguien dijo que la música era el verdadero idioma universal. Otra persona comentó que el único idioma universal es el beso y una tercera manifestó que la sonrisa es el idioma universal de las personas inteligentes. 
Si esto es así, entonces...
¿Soy más inteligente cuando te beso? ¿Y cuando sonríes debo sentirme besado o quizá debo prestar atención y escuchar música con cada sonrisa?
Siento que puedo viajar por el mundo con una guitarra componiendo sonrisas y recibiendo besos que atrapo como notas musicales. Y todos me entenderán con mis besos y regalaré inteligencia.
Que mi idioma musical regale sonrisas a un mundo que necesita sentirse besado. No importa su lugar de origen, pues sonreiré a todas y sentirán mi música en su piel.
Así pues te besare con música y sonreirás besos y hablaremos con sonrisas que escuchará el universo, hasta caer rendidos de inteligencia.
'El poder del beso nadie lo compara. Tierno manantial de sueños, anhelos ocultos de boca a boca, sabores inciertos siendo pequeños. Entra al corazón como rayo inminente, amante así es, amante escondido, y cuenta los segundos eternos que son difíciles de lidiar, es bandido. Hasta que sientes el roce de su efecto. Paraliza los sentidos como un veneno, llegar al cielo por chocar con otros labios, para que tu adicción no tenga freno. Y quedas preso en cada laurel, con miedo a no perderse en su laberinto para siempre sentirse feliz; pero al final su reflejo es distinto.'
Nuestros ojos se hablan sin decirnos nada, porque ya sabemos lo que queremos. Un poco de caos en nuestro orden.

lunes, 6 de abril de 2015

Qué es poesía?

'Hay cosas que son muy difíciles de cambiar. Amistades que aunque se disipan siguen presentes. Amores que matan por eso de que el amor cuando no muere mata, y amores que matan nunca mueren. Personas que han muerto, y sin embargo su recuerdo está más vivo que nunca. Existen también sonrisas de melancolía y lágrimas de felicidad. Por eso no entiendo porque siempre lo relacionamos con lo contrario. He mentido para no hacer daño y fui sincero para herir en lo más hondo del que me había bombardeado. Muchos han dudado de que fuese capaz de hacer algunas cosas, y yo he brindado por ellos mientras estaba en la cima y les he mandado un beso cargado de reproches, porque también he sido Judas. No supe que era el amor hasta que leí a Benedetti. La primera vez que probé esta droga fue leyendo a uno de los grandes, y desde entonces necesito dosis diaria de besos de Neruda, sentimientos de Bécquer y dosis de realidad de Escandar. Y no te voy a mentir. Cada día necesito respirar más cada vocablo. Sentir en mis venas fluir la poesía y llegar a lo más alto, aunque no se a donde, en una especie de éxtasis en forma de métrica. Y así me he dado cuenta de que la vida es lucha y no se luchar, pero todavía me mantengo en pie, no sé por qué.
Y que respirar a veces puede ahogarte. Y por eso odio profundamente las despedidas. Porque llevan un mensaje subliminal que grita que puede no haber mañana. Porque de todos los vocablos que me llevan al cielo, el único que me da miedo, es adiós.'