Quizá deberíamos dejar de planear, y empezar a volar un rato

Te prometo un siempre.

Mi vida era como una noche sin luna antes de encontrarte, muy oscura, pero al menos había estrellas, puntos de luz y motivaciones... Y entonces tú cruzaste mi cielo como un meteoro. De pronto, se encendió todo, todo estuvo lleno de brillantez y belleza. Cuando tú te fuiste, cuando el meteoro desapareció por el horizonte, todo se volvió negro. No había cambiado nada, pero mis ojos habían quedado cegados por la luz. Ya no podía ver las estrellas. Y nada tenía sentido
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domingo, 26 de febrero de 2012

Miaau.

Cuando te veo, el tiempo se detiene y me translado a otro lugar en el cual solo estamos los dos... en realidad ya no puedo pensar en nada más... en cuanto te veo, siento que debo tenerte aprisionado conmigo y al mismo tiempo dejarte libre.

Tu nombre es como el viento conjugado en sonidos, el fuego convertido en cenizas, el agua congelada en voces que surgen desde la profundidad de tu boca...

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