Quizá deberíamos dejar de planear, y empezar a volar un rato

Te prometo un siempre.

Mi vida era como una noche sin luna antes de encontrarte, muy oscura, pero al menos había estrellas, puntos de luz y motivaciones... Y entonces tú cruzaste mi cielo como un meteoro. De pronto, se encendió todo, todo estuvo lleno de brillantez y belleza. Cuando tú te fuiste, cuando el meteoro desapareció por el horizonte, todo se volvió negro. No había cambiado nada, pero mis ojos habían quedado cegados por la luz. Ya no podía ver las estrellas. Y nada tenía sentido
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miércoles, 5 de junio de 2013

Un café para toda la vida.

Realmente no tenía ni idea de que en algún momento esto pudiera pasar. Quizá realmente no sea tan raro, pero seguir hablando como si nada después de tanto tiempo, es importante para mi. Pasar de pensar de vez en cuando; ¿Cómo le irá? a habar con él todos los días y saberlo yo de mi propia mano. Sinceramente, no llegaba a acordarme de cuanto se hace querer. Recordar viejos tiempos que tuvieron buenos momentos me gusta, y me viene bien. Y eso es lo que me asa cuando hablo con el. Cuantos privados suyos tendré? Madre mía, si que hablábamos, si que nos contábamos cosas... Nunca alcancé a saberlo todo de él, pero eso es realmente difícil. De la primera vez que nos vimos es de la que más me acuerdo. Que sonrisa más terriblemente deslumbrante. Quedarme hablando hasta las tantas de la madrugada y ni mi cuerpo ni mi mente pudieran un segundo más, eso si era vida. No se porque me afectan tanto las cosas que me dicen, será que soy fácilmente controlable. Imaginarme que alguna cosa que le digo aunque fuera sin querer pueda haberle producido felicidad, haberle echo olvidar por un momento las preocupaciones, me encanta. Y realmente eso es lo que me pasa a mi cuando hablo con el. Supongo que a pesar de no hablar con el en mucho tiempo, los grandes amigos no se olvidan. Me hierve el alma por dentro por volver a verle y poder abrazarle. Si, puede que me pase de cursi, pero así son las cosas, y así os las cuento. Y él es, sin ni siquiera buscarlo, muchas cosas para mi. Unas pocas de mis sonrisas del día, mi mirada favorita, uno de mis mejores momentos, la voz que mejor recuerdo, mi traficante ternura, el abrazo que más ansío. Silencio, mis pensamientos hablan. Canciones, silencio, alegría, momentos, felicidad, sonrisas, miradas, personalidad, verano, ternura, amistad, confianza, deseos, diversión, locuras, impulsos. No, no son palabras al azar, esas cosas tienen algo en común. Me recuerdan a ti. Y que le vamos a hacer, no quiero remediarlo, me gusta así. 
Un café para toda la vida, por favor. Un café para dos, si es contigo.

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